sábado, 25 de septiembre de 2021

230. Silly habits

 Hay una curiosa paradoja en el hecho de que, por más que nos pasemos el día, y quién sabe si también la noche, pensando en ese natural y satisfactorio gobierno de nuestros actos y nuestras ideas que es el vivir consciente de cada día, con proyectos con que llenar el tiempo y razones con que justificar las cosas, basta con que se nos escape un gesto inconsciente, irracional o al menos imprevisto, para que, entre avergonzados y divertidos, estemos seguros ya para siempre de no ser en realidad otro que ese del que partió el gesto, y que todo lo demás es solo apariencia. Yo, al menos, estoy más seguro de ser éste que a veces hace alguna tontería que este mismo cuando se afana todos los días en construir su irrepetible vidita racional y modélica. (De Huellas, 1992)

Y así es. Con el tiempo he aprendido a jugar con estas cosas freudianas, a jugar con el límite, a domar lo irracional y a la vez disfrutarlo. Ese instante, en medio de una conferencia, en el que se evalúa sobre la marcha si soltar una pequeña ocurrencia, una tontería, y haberla dicho ya, y lamentarlo un poco, solo a medias, porque el rastro que deja es agradable, un poco gamberro. Jugar en el límite, caminar por el alero. Silly habits. (De Huellas, 2018)

Me pregunto ahora (que empiezo a releerlo), si ya habló también de esto Zarathustra.

 

 

229. La lectura y el ejercicio físico

 Yo no diría que hay una diferencia esencial entre un buen rato de lectura, de estudio, si se quiere (o se puede), y una sesión de ejercicio físico, de entrenamiento, si se quiere también. Así decimos, "físico", como subrayando su contraposición a algo que entendemos, menos concretamente, como "intelectual". Como la de la cabeza al (resto del) cuerpo. Esta indiferenciación relativa se manifiesta especialmente al terminar cualquiera de los dos tipos de actividad, de ejercicio (de práctica u obra, diríamos con términos de resonancia clásica), cuando descansamos durante un momento, relajamos la atención, levantamos la cabeza (sí, en ambos casos) y disfrutamos (si queda tiempo para ello) de un momento cálido de silencio, tranquilidad y satisfacción. 



sábado, 18 de septiembre de 2021

228. Otoño

                                     "No niegues
que el otoño es tu brasa, primavera.
La primavera tu agua, otoño."

 

                                    Adonis, Marrakech / Fez (El espacio entreteje la interpretación)  
                                                                                         (traducción de Federico Arbós)




domingo, 12 de septiembre de 2021

227. Leer, escribir

 Escribir: (solo) un motivo (más) para se(gui)r* leyendo.


*Este último paréntesis, robado (no sin cierto sentido) a Derrida: El animal que luego estoy si(gui)endo.

 

 



domingo, 5 de septiembre de 2021

226. Im(paciencia)

Habría que escribir todo un tratado contra la impaciencia; pero despacio, sin prisa.



225. No confundir

No conviene confundir esa cálida sensación de familiaridad con un ámbito de cosas, con el conocimiento o dominio (académico o no) de ese mismo ámbito, que, naturalmente, implica una familiaridad previa. Seguramente, se trata de una cuestión más de nivel, de progresión gradual, que de otra cosa. Familiaridad, conocimiento, nueva familiaridad (en otro nivel), nuevo conocimiento, etc. El criterio diferenciador podría ser la ingenuidad. Ser sensible a la ingenuidad, especialmente la de uno mismo, cuando se manifiesta.