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sábado, 3 de agosto de 2024

375. Esa patria

Continúo, despacio, casi gota a gota (tiempo de mucho trabajo, atropellado), la lectura del texto de Mohamed Mbougar Sarr (§368), y encuentro esto:

"Entonces ¿cuál es esta patria? Tú la conoces: evidentemente, es la patria de los libros: los libros leídos y amados, los libros leídos y despreciados, los libros que soñamos con escribir, los libros insignificantes que hemos olvidado y que ya no sabemos siquiera si llegamos a abrir alguna vez, los libros que fingimos haber leído, los libros que no leeremos nunca pero de los que no nos separaríamos por nada del mundo, los libros que esperan su hora en una noche paciente, antes del crepúsculo deslumbrante de las lecturas del amanecer. Sí, dije, sí: seré ciudadana de esa patria, seré leal a ese reino, el reino de la biblioteca." *

Conozco, y creo practicar, esa lealtad. Les mots.


* Mbougar Sarr, M. La más recóndita memoria de los hombres. Traducción de Rubén Martín Giráldez. Barcelona: Anagrama, 2023.




domingo, 26 de mayo de 2024

368. Recóndito.

 Eso decía yo en un QSY reciente de la naturaleza (intencional) de estas notas (§362). Ahora ese adjetivo, recóndito, que entonces elegí, después de una breve reflexión, frente a otros posibles, me lo devuelve el título de una novela que nos ha recomendado Alfa: La más recóndita memoria de los hombres, de Mohamed Mbougar Sarr*. El título original de la novela, en francés, dice La plus sècret mémoire des hommes, con cierto matiz sobre el carácter oscuro, difícil o semioculto, del ámbito de memoria que señala. ¿O es solo por las resonancias que secreto tiene para el oído de un hispanohablante? Decir casi lo mismo es el título del espléndido libro de Umberto Eco sobre la traducción (con pocos libros he disfrutado tanto). Cuánto importa ese casi. En las primeras páginas de la novela de Mbougar Sarr, encontramos el origen de su título, una cita de Roberto Bolaño (de Los detectives salvajes, otro texto con el que disfruté mucho). El autor chileno habla ahí, con una ironía que podríamos llamar existencial, de lo (igualmente) efímero de la Obra y de la Crítica, sostenidas ambas por generación tras generación de Lectores (sic), y concluye:

"Y un día la Obra muere, como mueren todas las cosas, como se extinguirá el Sol y la Tierra, el Sistema Solar y la Galaxia y la más recóndita memoria de los hombres."

Memoria es un término disémico (al menos) que puede indicar tanto la función (o la capacidad) de recordar como el producto de esa función, el recuerdo. El futuro decadente que invoca Bolaño supone, sencillamente, la desaparición de lo humano, esto es, de los hombres y de las huellas que han dejado a su paso por el Universo (por ponernos tan estupendamente cósmicos como el autor). Hasta ahí todo claro, pero ¿por qué dice recóndita, por qué la más recóndita memoria? ¿Se trata del último vestigio humano, dado el contexto apocalíptico imaginado, o de aquello que se encuentra más oculto, más profundo en la realidad del ser humano, lo que debe ser desvelado por un filosofar auténtico, según Heidegger

Veremos, como intuyo, si esta otra polisemia (hermenéutica) define el plano por el que discurre el texto de Mbougar Sarr. Para empezar, como estoy comenzando, en realidad, la lectura de la novela, quiero señalar (y sonrío al recordar mis cuitas de traductor en el pasado) cómo en la versión española de la novela, el sècret del título ha vuelto al recóndita original. Eso no responde a nuestras preguntas, claro, e incluso puede sugerir alguna más. ¿Quién ha puesto esa memoria ahí, en ese lugar tan recóndito, secreto? ¿Y quién la recuperará?

 

* Mbougar Sarr, M. La más recóndita memoria de los hombres. Traducción de Rubén Martín Giráldez. Barcelona: Anagrama, 2023.