viernes, 30 de noviembre de 2018

22. Leer y escribir

A veces me imagino como escritor, pero no es más que una ilusión agradable. Es mucho mejor leer que escribir, pero al final es inevitable imaginarse a uno mismo escribiendo, ¿lo que lee? No, otra cosa, un comentario, otra historia, siempre hay alguna historia rondando por ahí; no sé, escribiendo, ocupando por un momento ese lugar misterioso y privilegiado del narrador. Sin embargo, no se trata de eso. La narración no resulta de un acto espontáneo o primordial, natural como una fuente o un soplo de viento. No, el narrador forma parte de la ficción, es un actor más al servicio de un guion cuya geometría no le pertenece. Imaginarse a uno mismo como ese otro que construye desde atrás, desde arriba, el escritor, eso cuesta mucho más, y no resulta tan agradable. (De Huellas, 2007)