sábado, 7 de septiembre de 2019

85. Un placer infantil


“Nunca había perdido aquel placer infantil de ver páginas cubiertas por su propia escritura.” (I. McEwan, Expiación)

Ni siquiera hace falta que sean páginas. Basta con que algo salga de la mano y de la pluma, tenga sentido y produzca alguna satisfacción. Escribir algo es haberlo escrito (enérgeia), diríamos en clave aristotélica ("vivir es haber vivido").