Si algún día me canso de perseguir fantasmas científicos y
filosóficos, si pierdo definitivamente esta inercia que aún me sigue impulsando
ciegamente, me dedicaré entonces a leer novelas, lo único real, y a pensarlas,
e incluso a escribirlas. (De Huellas, 2017)
Lo real es precisamente el título de una novela de Belén
Gopegui, a quien leí durante años con una extraña sensación de afinidad personal (en mi vida de lector, solo
me ha ocurrido con ella y con sus novelas), como si nos hubiéramos conocido
alguna vez, en la infancia o adolescencia, o hubiéramos compartido experiencias
como las que muestra en sus textos.