domingo, 1 de diciembre de 2024

391. Gérmenes de orden

Hace unos días, cuando participé en la presentación de la biografía de Faustino Cordón que se acaba de publicar (§390)*, recordé un pequeño texto suyo que yo, con 16 o 17 años, había copiado en un papel y tenía pinchado en un panel de corcho, delante de mi mesa de estudio. Tenía algunas frases más allí pinchadas, aunque solo recuerdo ahora esta y una de Einstein. El texto, que pertenece a La función de la ciencia en la sociedad (1966), está muy oportunamente citado en la p. 222 de la biografía.

"Por desalentador que nos resulte, tenemos que aplicarnos en construir pequeños gérmenes de orden y hacerlo sin perder las coordenadas del orden general, a fin de, en lo posible, prepararlo y facilitarlo. Este es nuestro destino actual que tenemos que aceptar animosamente; sin duda, el orden desde abajo trasciende con más dificultad hacia arriba, pero también lo hace, y, por lo demás, la organización es una tarea permanente (...)."

Más allá de su propia y singular teoría biológica, y también de su figura personal, tan carismática, tiene interés en Cordón algo que podríamos llamar su imagen del mundo. Ahora que he vuelto a leer sus textos, y los míos de entonces, veo que esta Weltanschauung, también singular, que le sirvió siempre de emblema, de bandera, a la vez que de escudo protector, está centrada, creo, en su concepto de pensamiento general. Merece alguna atención este concepto: lo común, lo impersonal, y también lo más verdadero en cada momento histórico, o al menos lo que tiende a ello. Lo más alto, decía él siempre, pero no hipostasiado desde arriba, sino alzado, como escribió Saramago.

 

* De Miguel, E, Cordón, E. Faustino Cordón. El biólogo insumiso. Madrid: El Garaje Ediciones, 2024.

 

 

miércoles, 27 de noviembre de 2024

390. Insumiso

 Semanas intensas de recuerdos y emociones en torno a la biografía de Faustino Cordón, recién publicada*. Y en medio un par de congresos, con sus viajes y kilómetros correspondientes, Madrid, Barcelona (Foucault), Madrid, Valencia y, para terminar, de vuelta a Madrid. Muy interesante la intervención de F. J. Ordóñez, profesor de Historia de la Ciencia, en la presentación de la Residencia de Estudiantes (11 de noviembre) y su alusión al Estado-cadáver de Hobbes** (cualquier estado tras una guerra civil), y a la España B del exilio interior, a la que Cordón perteneció. En cuanto a la presentación del 25 de noviembre en el Ateneo, mi satisfacción por haberla, mal que bien, co-protagonizado. Fue una oportunidad (intensa, como todo lo relacionado con Cordón) de recordar aquellos años de aprendizaje y orientación. 

La memoria tiene lugar en el presente, pero es del pasado, dice Aristóteles en De memoria et reminiscencia, y esa es su aporía fundamental. Sartre, por su parte, se pregunta en El ser y la nada: "¿Cuál es el ser de un ser pasado?" Sea como sea que intentemos resolver estas arduas cuestiones, que habrían sido muy del gusto de Cordón (y que él habría planteado seguramente en términos del medio propiamente humano), este biólogo insumiso, como recoge el título de su biografía (y, por encima de todo, fáustico, añadiría yo), estuvo muy presente en ambas presentaciones. Tanto, que en la mía, que acompañé de recuerdos personales (demasiados, quizá) hice varias veces el gesto de dirigirme a él como si estuviera sentado ahí a mi lado, acompañándonos.

Los recuerdos, lo mismo que los libros, se abren y después, en algún momento, se cierran, no sin dejar algún rastro de nostalgia, de melancolía, y una estela de pensamientos sobre los pasados posibles. "Conmigo vais...", cantó el poeta, y así es, conmigo vienen aquellos años de pasión científica, aprendizaje e insumisión.


* De Miguel, E, Cordón, E. Faustino Cordón. El biólogo insumiso. Madrid: El Garaje Ediciones, 2024.

** La imagen del Estado como un cuerpo artificial se encuentra en la breve Introducción a Leviatán.




domingo, 10 de noviembre de 2024

389. Cada día

 Un poema, cada día un poema (al menos). Es una regla de higiene que me impuse hace años, leer cada día al menos un poema. Uno, "entre las voces, una". Como una de esas reglas de auto-disciplina ascética que Foucault recomendaba en sus últimos años de vida y pensamiento. Para construir la vida, la propia vida, como un arte, el arte de la vida.

No siempre lo consigo, claro, también se trata de eso (de intentarlo siempre, quiero decir). Unas veces, muchas, uno busca el poema, sistemáticamente, y al autor y su obra poética entera (la de los grandes), para estar leyéndola siempre. Otras veces, ya lo he contado en estos QSY, es el poema el que se presenta con toda su fuerza arrolladora (con frecuencia por la web). Ayer fue esta maravilla de Dylan Thomas, que ya conocía, y que seguramente sabría de memoria si me hubiera criado en inglés:

"(...)
Do not go gentle into that good night.
Rage, rage against the dying of the light."

Una hermosura, grande y triste.



sábado, 26 de octubre de 2024

388. La caída

 Hace años ("pre-pandemia", suelo decir para resumir) escribí un largo QSY (§35) que tenía como protagonista indirecto (como conjunto complementario, diría Mu) al dirigente político ahora caído. Se trataba entonces de lo político y organizativo, y de lo ideológico. Ahora el torrente mediático, de planos y estratos múltiples que no pretendo abordar aquí, me lleva (sigo bajo la influencia de una constelación que incluye a Merleau-Ponty y a Foucault) a una pequeña reflexión sobre el cuerpo y su encuentro con otros cuerpos, piel con piel, que es (no dejemos de ser en esto siempre aristotélicos) también alma con alma; sobre la reciprocidad esencial de ese encuentro. No debería ser posible disfrutar, ser feliz, si no lo es, a la vez (hama, diría Aristóteles) el otro, la otra persona. No lo es, en realidad, y afortunadamente se ha podido legislar (gracias a los nuestros, las nuestras) para fijar ahí el límite del delito: íntimo, profundo, traumático. Son oportunos aquí estos versos de un poeta comunista*, Juan Rejano:

"He de olvidarme de mí 
para no olvidar lo ajeno."

Nunca, y aun menos ahí, en el (glorioso) cuerpo a cuerpo.


* En relación con esta categoría (poeta comunista), ver nota al pie en §257.
 
 
 

viernes, 25 de octubre de 2024

387. El Imperio contraataca

 Escucho con un escalofrío esta declaración de Antony Blinken, Secretario de Estado de los E. U. A., durante su reciente visita a Israel. Traduzco:

"Desde el 7 de octubre, hace un año, Israel ha alcanzado la mayoría de sus objetivos estratégicos por lo que se refiere a Gaza, y todo ello con la idea de asegurarse de que no vuelva a ocurrir un 7 de octubre. En el espacio de un año ha conseguido desmantelar la capacidad militar de Hamas, ha destruido gran parte de su arsenal, ha eliminado a sus líderes principales, incluyendo, recientemente, a Yahya Sinwar. Esto se ha producido con un coste, gran coste, para los civiles palestinos de Gaza. Ahora es el momento de convertir esos éxitos en un éxito estratégico duradero. Y en realidad hay dos cosas que hacer: traer a los rehenes a casa y poner fin a la guerra (...)."

Ahora ya sí, misión cumplida; la necropolítica más fría y atroz, una nueva bomba atómica. Ni siquiera es posible contar el número de muertos, más adelante se harán estimaciones, como la publicada hace unos meses en The Lancet* (y no serían menos de 200.000 a estas alturas).

"Israel ha matado en Gaza a más niños que hombres y mujeres." (Naciones Unidas) **

"El ejército israelí ha asesinado en un año a más mujeres, niñas y niños en Gaza que en cualquier otro conflicto reciente durante el mismo periodo." (Oxfam Intermón) ***

Así son los éxitos de Blinken. Que nadie ose desafiar al Imperio, especialmente si pertenece a eso que geopolíticamente se viene llamando el Sur.


 * Khatib, Rasha et al. Counting the dead in Gaza: difficult but essential. The Lancet, Volume 404, Issue 10449, 237 - 238. https://www.thelancet.com/journals/lancet/article/PIIS0140-6736(24)01169-3/fulltext

 ** https://news.un.org/es/story/2024/09/1532906

 *** https://www.oxfamintermon.org/es/nota-de-prensa/israel-asesina-mas-mujeres-menores#



jueves, 17 de octubre de 2024

386. Ficción, memoria e historia

 En Nada se opone a la noche, Delphine de Vigan desmenuza* autobiográficamente la historia de su madre, Lucile en la novela, enferma de trastorno bipolar.

La historia es dura y se va haciendo, a medida que avanza, cada vez más desoladora, terrible y destructiva para la madre y sus dos hijas.

"Mi memoria recela de otras escenas referentes a Lucile, más violentas aún, que seguramente no escribiré jamás." **

¿Será la ficción lo que se escribe y la realidad (¿la historia?) aquello que no se puede escribir, lo intolerable, lo insoportable? 

¿Era eso lo que le molestaba a Platón de los poetas?


* No se me ocurre otro término, aunque lo que la autora hace es aun más violento y doloroso, como si estuviera abriendo a golpes, rompiendo, cada episodio de unas vidas compartidas, para extraer un contenido doloroso y olvidado. 

** De Vigan, D. Nada se opone a la noche. Barcelona: Anagrama; 2023, p. 284.



domingo, 13 de octubre de 2024