El derrotismo de la izquierda española, y en particular de la madrileña, forma parte del inóculo original (sí, como el pecado) que se nos proporciona (como marco preteórico, como paradigma), sabe Marx cómo, con nuestra educación, aun cuando esta haya sido progresista. Cada cosa hacia su lugar propio, como en la física aristotélica, y el de la izquierda es abajo, como la tierra. Naturalmente.
Estábamos a punto de iniciar la desbandada, después del anuncio de unas elecciones bien calculadas, y anunciadas como un rayo amenazador, para mayor gloria de la derecha (casi siempre) triunfante, cuando un dirigente, como en la metáfora (también) aristotélica (§41) se detiene, mira hacia atrás, e inicia la recomposición de la izquierda, "...y en breves instantes todos los que huían se vuelven a formar de acuerdo con el principio (arché) que los une."
El principio, arché, Prinzip, el principio esperanza (Das Prinzip Hoffnung).
No hay comentarios:
Publicar un comentario